Para que el mundo te trate bien, tú debes
tratarte bien.
¿Cómo podrías sentirte dueño del mundo, si tus zapatos tienen
agujeros?
¿Pero qué importa? Nadie me anda viendo los zapatos…"a mi me gusta sentirme pobre, ¿Tu sabes cuáles son las ventajas de ser pobre?" Ese es el meollo,
tú lo sabes y tu cuerpo lo siente.
Tu eres el único que puede hacerte sentir
especial. Si no tienes dignidad, nadie podrá dártela.
De hecho, ¿sabías que nuestra casa influye
en cómo sentirnos? Si, así como lo lees. Así que de ahora en adelante, debes de
acondicionar un espacio que te anime tan pronto entres. Asegúrate de que tu
hogar releje tu personalidad. La pulcritud no cuesta nada. Es mejor vivir en un
apartamento limpio con todos los rincones limpios, que en una mansión sucia.
Consiéntete, nutre tu cuerpo, mantén una
casa limpia y te sentirás bendecido por la vida. Tu manera de caminar influye
en tu manera de hablar, cada palabra que dices, influye en toda tu vida.. Tu
manera de vestir influye en tu manera de sentir. El cuidado que tengas de ti,
lo tendrás también para los demás.
¿Cuántos solemos comer en platos
despostillados, manchados por el uso y el tiempo o en su defecto de plástico;
mientras que nuestra vajilla de porcelana permanece en la alacena de maderas finas?
Conozco muchas personas así, se les ha olvidado que un día van a morir y
dejarán esa vajilla intocable, y te puedo asegurar que alguien más la usará y
terminará haciéndola pedazos.
“Debes de aprender… que si tienes algo
hermoso, ¡hazlo pedazos tú!
O que tal aquellas familias que adquieren
un auto nuevo y colocan sabanas viejas o playeras rotas como fundas para los
asientos. Muy práctico ¿no? Así preservas el valor de tu auto, aunque parezca
que viajas en una canasta de lavandería. Y cuando decidas vender tu auto, pues
el que lo adquiera, disfrutará del buen estilo y confort que tú no disfrutaste.
Pero si así te gusta, qué se puede hacer. Pudiste comprar forros acordes a tu
auto y disfrutar aquello por lo que has pagado. Pero seguro piensas que no es necesario ya que el dinero no te alcanza... será que tus creencias también influyen en que el dinero no te rinda?
Consiéntete un poco. Tal vez te estás
preguntando ¿qué tiene que ver mi bienestar con que alcance mis metas en la
vida? ¡Todo! Si sentimos que somos prósperos, atraemos prosperidad.
Dice mi hermana Lú: “Cuando sea exitosa,
cambiaré mi estilo de vida” ¡ERROR! Para ser exitosa, debes de empezar a vivir
el éxito, debes de sentirlo ahora, aunque me digas que no son tus creencias, que es tu empleo el del problema porque nunca te alcanza el dinero.
